Los perros y su habilidad para sentir las emociones humanas

Sentir fuertemente las emociones en el rostro de cualquier persona no siempre es sencillo. Pero los perros cuentan con el poder de hacerlo.

LA psicóloga Laura V. Cuaya, cuando realizaba el Doctorado en Ciencias Biomédicas en el Instituto de Neurobiología de la UNAM, que terminó en 2018, hizo u estudio con imágenes de resonancia magnética funcional cómo el cerebro de los perros procesaba las caras de los humanos.

Unos estudios se enfocaron en las respuestas de los caninos a los rostros de otros ejemplares de su especie y a la cara de los humanos que manifestaban emociones.

Cuaya señala al Diario desde Budapest, donde trabaja como especialista en la Universidad Eötvös Loránd,  que en los estudios en los que los caninos vieron varas humanas neutrales y contentas hallaron que la corteza frontal, el núcleo caudado y la corteza temporal responden más a las caras contentas que a  los neutrales.

Luego, con el fin de conocer si los perros tenían la capacidad de detectar más emociones que le enseñaron caras humanas que manifestaban tristeza, miedo, felicidad y enojo. Allí lograron observar que los caninos pueden diferenciar entre todos los pares de emociones (por ejemplo, tristeza vs felicidad), sin embargo, la emoción que mejor diferencian es la felicidad.

Para los erros, sentir una emoción en el rostro de las personas resulta un desafío extra ya que los humanos son una especie distinta y ellos requieren de brindarle atención a variaciones sutiles. A su vez, otros análisis conductuales que ya habían mostrado esta habilidad en los caninos, por lo que la contribución de la especialista fue el estudio de las redes cerebrales.

¿Los resultados del análisis quieren decir que los caninos poseen una inteligencia superior a otras especies?

Destacan el estilo de cognición que posee cada animal. La mejor forma de observarlo es que las habilidades que poseen son las que requirieron para adaptarse a sus ambientes.